Diseñadores de "petacos", No de pinballs

Aquí va mi pregunta/propuesta

Resulta que con los pinballs americanos no tenemos problemas en averiguar quién diseñó tal mesa, y de paso mirar qué otras mesas diseñó ese mismo diseñador, para así compararlas, o por simple curiosidad.
Pero el tema se vuelve mucho más complicado cuando hablamos de pinballs españoles. Lo más que podemos averiguar es si se trata de una réplica de algún modelo americano, y así saber quién hizo el diseño original.
Pero en caso de máquinas como, por ejemplo, mi idolatrada "Mephisto", ya me puedo volver loco. No hay información.
Los que llevamos tiempo en esto hemos oído muchas veces los nombres de Steve Richie, Pat Lawlor, Joe Kaminkov y unos cuantos más. Pero son pocos a los que les suena el nombre de Eulogio Pingarrón, y es algo que me parece muy injusto porque los diseñadores españoles han contribuido a que los que antes éramos chavales pudiéramos encontrar pinballs en los bares, y ahora tengamos pinballs en casa y nos juntemos en grupos, quedadas, liguillas y campeonatos. Una gran deuda, sin duda.
Yo personalmente, aparte del amigo Eulogio sólo conozco otro nombre de la industria del pinball, el desaparecido Juan Paredes, junto a quien desapaerió su empresa Juegos Populares. Y ni siquiera sé si diseñó algún pinball. Tampoco sé quién diseñaba las mesas de mi fabricante favorito español, Playmatic, ni las Inder (¿alguien sabe quién diseñó la Canasta 86?)
Temo que no haya muchos datos acerca de este tema, y que por el momento sólo Don Eulogio sea capaz de nombrarnos los tableros que él mismo diseñó, pero en este momento echo en falta una base de datos de diseñadores de mesas y otras personalidades que formaron parte de esta antaño gran industria de nuestro país.
¿Existe alguna posibilidad?

Ante todo deberíamos distinguir entre lo que se considera una creación técnica de juego o una creación artística/decorativa.
Cuando yo hablo de creaciones, no me refiero a los dibujos
Yo creaba un modelo nuevo en Petaco a sugerencia de Juan Paredes, él me indicaba el tema que creía que podría estar de moda, lo comentábamos, le dábamos el nombre y a partir de ahí yo, sobre el dibujo a tamaño folio de un tablero, diseñaba a trazos rudimentarios los caminos de la bola, rompía, borraba, corregía, y…. jugaba mentalmente y veía en mi mente por donde se me había escapado la bola, y así una y otra vez hasta que lograba mantener la bola en juego un tiempo prudencial.
La Chek Mate la inicié (en el invierno del 76) a lo largo de varias noches en que tuve que hacer guardia en una clínica a la puerta de la habitación donde agonizaba un familiar, y donde a la 2ª noche comprendí que las noches se pueden hacer muy largas, así que a la noche siguiente me fui provisto de un gran cuaderno, lapicero y borrador y durante varias noches estuve tomando notas y haciendo modificaciones, para después, en un tablero de dibujo, colocar el contorno de un tablero de juego a tamaño real e ir colocando pasillos, bumpers, dianas, impulsores de bandas, Etc.
Mi Tío falleció y a su muerte nació un nuevo modelo de Pinball.
Una vez que el tablero de juego ha sido completado y cableado y funcionando, se somete dicho juego a unas pruebas que consisten en ir jugando partidas, anotando resultados, tomando tiempos, poniendo a jugar a jugadores de diferentes niveles de destreza y estudiando sus reacciones en cada jugada y en cada partida; cada cierto nº de jugadas de “deja enfriar” la máquina y el jugador, se introducen modificaciones…. Y así un largo Etc.
A continuación y ya con el juego acabado, se describe en unos folios el tema artístico que se desea representar en el frontal de la máquina y se representa todo mediante un bosquejo a sucio y en un borrador, indicándole al dibujante que figuras debe resaltar, como tiene que iluminar “el cuadro” y se le da en un plano los cuadros reservados para los contadores y demás puntuaciones.
La decoración del mueble la hacía yo (que para eso he sido dibujante)
De los demás fabricantes españoles, poco es lo que puedo decir;
Maresa “calcaba” las máquinas de Gottliebs y fueron pocos modelos los que fueron originales suyos. (El Bus Stop me lo enviaron a Petaco para que lo estudiase y les dijese por qué no era buena máquina)
Inder “fue bueno entre los buenos”
Centromatic copió y pasó sin pena ni gloria.
Billpor fue una voluntad de Florentino Martinez pero faltaba “chispa”
Faer se inició casi a la vez que Petaco pero faltaba ingenio
Playmatic prometía, le ponía interés, pero copiaba y a veces no sabía el qué (decoraba aceptablemente)
Talleres del Llobregat tenían buenos mimbres, sabían hacer casi cualquier cosa, pero inventaban poco.
De los demás, y salvando alguna honrosa excepción, es mejor correr un tupido velo.

Diseñadores españoles con personalidad?
Supongo están en la lista donde están sus Patentes.

Muchas gracias, Don Eulogio. Esto para mí ha sido una clase magistral.
Me siento muy afortunado de leer estas lineas.