Bueno antes de entrar a contar nada sobre el Torneo, me gustaría hacer un comentario.
Ultimamente hay un saludable aumento de Torneos a lo largo y ancho de España. A las citas clásicas, se les han ido uniendo liguillas, torneos veraniegos auspiciados por un único anfitrión que nos posibilita jugar con su colección, torneos nocturnos,... Parece que una sana fiebre pinballero se ha apoderado de todos nosotros. Pero me he estado preguntado si no hay un "algo" más allá. Se habla de que la verdadera fiebre no estriba en poder jugar al pinball en los más variopintos escenarios, sino que lo que se ha desatado es una fiebre por los puntos que se reparten en los campeonatos. Parece que si el Torneo no es puntuable, carece de caché. Si la verdadera razón de ir a jugar, solo se basa en obtener puntos y en estar situado lo más arriba posible del ranking, me temo que los días del pinball están contados.
En mi caso llevo más de dos años yendo a casi todos las competiciones pinballeras que se celebran en España. Queda en mi haber Villena, que casualmente no es puntuable. Y la verdad es que siendo un torneo que organiza mi amigo Juan Carlos Durans, me duele especialmente. Sé que más de uno ha llegado a comentar que si estoy más arriba o más abajo en el ranking de la WPPR, es unicamente porque voy a muchos torneos. Pues bien, ¡¡me la sopla!!. Me da igual ser el 23 o el 38 de España. Como a todo hijo de vecino me gusta ganar. ¿A quién no?. Pero vamos que si voy a los Torneos es por la gente. Puedo decir que he conocido gente genial gracias al pinball, que comparto con mucha gente un hobby que me llena. Para mi tener la suerte de viajar a un sitio, poder hacerlo con amigos, jugar a pinballs que normalmente no tengo a mi alcance y pasarlo bien es en sí el mayor de los premios. Si solo me moviera viajar para estar situado en un ranking, que tampoco refleja la realidad de las cosas, entre los mejores jugadores, mejor haría en dejarlo. No juego bien, suelo quedar mal y cada punto me saldría echando cuentas, por un ojo de la cara. Como bien dice un verdadero gurú de los pinballs, mucho mejor de lo que yo nunca seré: ¿fiebre por los puntos? ... ¡¡Para lo que valen!!.
Concluyo aquí esta reflexión/charla acerca de lo que yo entiendo por ir a jugar un Torneo. Cada cual que juegue por lo que le plazca. Yo seguiré haciendo por el placer de conocer gente, ver a mis amigos, reirme y pasarlo bien.
A lo que vamos. El Torneo de Gijón, desafortunadamente como ha dicho Juaney, contó con varias bajas de última hora. Nos habría encantado a todos ver a Lady Iratxe, haber disfrutado del juego de Carlos y su particular posíción de juego, a lo que yo bauticé como de "Lucky Luke", haber podido hacer chistes junto a Vicente dMode, a costa de meternos con algún ex-campeón sideral de Monza, haber tenido la suerte de ponerle cara a Richard, del cual nos hemos hartado de ver sus diseños para nuestros carteles pinballeros.... Pero bueno no pudo ser y en una refrescante mañana nos juntamos 11 locos en el garaje (casi el doble de grande que toda mi casa) de Gonzalo "Petaco".
El sistema de juego fue el de pin-golf. Como creo que nunca antes se había jugado en España, os explicaré como va. Cada máquina estaba ajustada a un máximo de seis bolas, con excepción de la electromecánica Surf Champ, que lo estaba a cinco. Cada uno a su vez, había sido configurada para dar "replay" a una determinada puntuación. El objetivo no es en este caso hacer el mayor número posible de puntos, sino el alcanzar el replay en el menor número de bolas. Así se podía hacer un "eagle" si se conseguía llegar en una sola, bola, un "birdie" si se hacía en dos, el "par" si se hacía en tres, "boogie" si se hacía en cuatro.... El tope estaba puesto en añadir a tu tarjeta de jugador un máximo de siete puntos en el caso de que no se consiguiera el objetivo concluidas las seis bolas. Tenía ganas de probar este tipo de competición y puedo decir que a pesar del horrible inicio que tuve, cinco 7 y un 6, no dejé en ningún momento de disfrutar, aunque como es lógico me habría encantado no poner tanto siete en mi tarjeta.
Acabadas siete rondas nos desplazamos a comer. La sobremesa fue extensa a la par que divertida. No solo difrutamos de la comida en sí que no parecía tener final, sino de numerosas bromas y comentarios, en muchos casos derivados de la filosofía de José María Perimatón, el cual al calor del vinillo, estuvo especialmente locuaz. Desde aquí un abrazo para "Ía". Sigues siendo el alma de la fiesta allá donde aterrizas.
Por la tarde disputamos las tres últimas rondas, para después pasar a los play-offs. Los seis primeros clasificados jugaron un play-off a doble enfrentamiento, estando exentos Juaney y Gonzalo por haber quedado primero y segundo respectivamente en la fase previa. Los menos buenos, también jugamos un play-off para dilucidar como quedaría establecida la clasificación final. Por el título, en primera ronda Javier Inderman se deshizo no sin muchas dificultades de Juan Antonio Ironball y el rookie ponferradino José Diaz (que gran torneo y que gran persona en todos los aspectos) a su vez de Cisco. Así pues las semifinales serían Gonzalo-Inderman y Juaney-José Diaz. Aparentemente Javier tuvo menos problemas que en la ronda anterior para deshacerse del anfitrión y alcanzar la final. Por otro lado Juaney sufrió para poder jugarla. Tras perder su primer enfrentamiento, tuvo que hacer en una extraordinaria segunda bola en la LotR, la friolera de 20 millones de puntos y todo ello con la presión que suponía saber se fuera si no lo hacía, al tener que jugar en segundo lugar. Debido a que tras las dos rondas pertinetes Juaney y José habían empatado a "bolas", el hecho de que en la ronda previa (como marcaban las reglas) el canario hubiera quedado primero le permitío jugar el duelo final. Y una vez allí, pasó lo que ultimamente sucede, que Juaney, en un estado de forma increible y con la moral por las nubes tras ese decimosegundo puesto cosechado en el mundial de Suecia, se hizo con el trofeo.
Al final y tras un rato de free-play, se repartieron los trofeos y el torneo se dio por concluido. Agradeceros a todos el día. A mis compañeros de viaje por soportarme durante 900 km. A Gonzalo por posibilitar que se jugara el Torneo en su casa. A Juaney y a José Díaz, por su trabajo para que todo saliera bien. Y a Cisco, Fran Junior, Iñaqui Irenos, Javi Inderman y Perimatón por ser tan buenos competidores. Todo un día de pinball en estado puro...
...Y como sé que lo estáis esperando todos y que probablemente antes de tragaros todo este rollo ya habríes pasado a echar un ojo, os dejo unas fotos de lo que aconteció, a excepción de en la sobremesa. Un abrazo para todos.
Los participantes.
Parte de las máquinas del Torneo.
Los trofeos, incluido el del año pasado.
Javier Inderman aterrorizado con lo que ve en la Scared Stiff.
Miguel Jetlager, con mucho más Jet-Lag que nunca, viciándose en la Rally-X
Cisco en la Surf Champ y José Díaz en la Monster Bash
Tiempo de Ronda.
Miguel, Ironball, Irenos, Perimatón y Cisco en la momento tabaco.
¡¡Sorpresa!!
Miguel Jetlager y Fran Cisco Jr.
Los últimos clasificados del Torneo... pero dando guerra.
La doble-I. Inderman e Ironball.
José Díaz y Cisco, enfrentados en cuartos de final.
¿Qué es un torneo de pinball sin una pequeña avería?
Supervisando desde las alturas
Iñaqui y Miguel dándole a las EMs de juego libre.
¿Estará Peri enamorado?
Tres joyitas
Ponferrada presente
Javi supervisando la ronda.
Juan Antonio demostrando sus habilidades en la LotR.
Iñaqui dándole a la Scared Stiff.
¡¡Anda si soy yo, jugando!!
Tiempo de relax, cervecita para el pecho.
El trofeo para el ganador
Concentración.
El a la postre campeón dándole duro a la Monster Bash.
Dos generaciones unidas por un hobby común.
El Trofeo de campeón de 2.010 (solo Paco Lobatón sabrá "aonde" lo tendrían metido el año pasado).
Cuarto clasificado: José Díaz, en su primera aparición en un Torneo. Casí na como vienen arreando estos jovenzuelos.
Tercer clasificado: Gonzalo "Petaco".
Subcampeón. El Manchego indomable Javier Inderman.
Y este año haciendo doblete Juaney, el Campeón 2011.
Cuadro de honor. A destacar que las nuevas generaciones son grandes van a dar grandes jugadores.
